Estaremos en plena observación para que encuentre un espacio y vaya ganando terreno en base a lo que muestre». Si bien Marcelo Gallardo contó cuál es su idea con respecto a Alexander Woiski, que llegó a River como refuerzo con el pase libre tras desvincularse del Mallorca, en principio el delantero de 19 años que integró la Selección Sub 20 en el Sudamericano de este verano en Venezuela se entrena con el plantel profesional porque el Muñeco desea evaluarlo en profundidad antes de tomar la decisión de si el mayorquín seguirá trabajando con el grupo de profesionales o lo hará con la Reserva.
La incorporación de Woiski tuvo mucha repercusión en Núñez porque los dirigentes del CARP le pusieron una cláusula de rescinsión de 100 millones de euros, una cifra que además tiene un mecanismo extra de retención que ya es habitual en River: subirá en un 20% en los diez últimos días del mercado. Igualmente, este tipo de convenios responde a una decisión política del club, ya que la idea de la CD es que las nuevas promesas de River -Lautaro Rivero, de 21 años, extendió el vínculo por el mismo monto- también tengan ese piso en el precio de salida, un 122% mayor a la de la de Franco Mastantuono (€ 45M), en un marco de flexibilización en las ejecuciones, modificación establecida recientemente en el fútbol argentino.
Nacido en Palma de Mallorca el 17 de marzo de 2006 fruto del flechazo entre el agente de futbolistas Ronnie Woiski y la marplatense Laura Pioletti, Alex creció admirando la leyenda de River a distancia. Y jugando a la pelota soñando con algún día dar el salto a ese club que lleva en el corazón buena parte de su familia paterna: las fotos de la infancia del español a las que Olé pudo acceder lo comprueban.
Alex, con el gorrito de River (Gentileza familia Woiski).
La explicación Gallardo sobre la incorporación de Woiski
«Es un joven talento que pudimos sumar, un juvenil que estuvo en el Sudamericano, creíamos que teníamso la posibilidad de traerlo y él tenía el deseo de venir. Es un juvenil, pero para proyectarlo. Es una buena posibilidad». Claramente, el DT necesita analizar las cualidades físicas, futbolísticas y mentales de Woiski para confirmar si es mejor que vaya sumando roce con la Reserva o si ya está preparado para competir en la Primera, algo que en el corto plazo no suena factible. Por eso, Gallardo por el momento prefiere tenerlo cerca y que el pibe se vaya midiendo con los jugadores profesionales.
Alex Woiski junto a Gallardo, Brito y Di Carlo en su presentación como refuerzo de River (Prensa River).