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«¿Qué querés hacer con Merentiel?». La pregunta fue simple, directa. Y abrió aún más la duda de cómo se decidió el primer cambio de Boca en su derrota ante Huracán del pasado domingo. Porque esas palabras que Juvenal Rodríguez (el ayudante de campo de Miguel Ángel Russo) le dirigió al DT quedaron expuestas ante las cámaras. Y dejaron la certeza de que la escena vivida en la fría noche del Ducó pinta de punta a punta el momento del Xeneize.
«Nada, afuera». La respuesta tampoco llevó demasiada luz. Una orden clara que subió de tono sin que siquiera se voltee a ver la insólita imagen de un equipo completo a punto de sacar del medio y de recibir un jugador número 12 sin que nadie estuviera dispuesto a cederle el lugar. «Afuera, dale. Hacé el cambio. ¡Hacé el cambio!», se envalentonó Miguelo antes de que se desencadene todo lo que vino después.
Y lo que vino después fue esa incredulidad de Merentiel mirando el cartel que marcaba su número para que sea él el reemplazado. Y la salida intempestiva rumbo al vestuario, y la ventana rota, y una implosión que por ahora es bronca masticada y no mucho más.
Boca Juniors –
La secuencia previa al cambio de Merentiel ante Huracán
Video: ESPN
Porque Merentiel es consciente de su aporte al equipo. Del actual y de todo lo que viene dando desde que puso su primer pie en el club, hace poco más de dos años. Y también tiene claro de las innumerables veces que debió remar de un punto más atrás del que había logrado acceder en la pantalla anterior. O sea, de tener que correr de atrás aún siendo el más productivo de todos los delanteros desde que se puso la camiseta de Boca.
El vidrio roto en la puerta del vestuario visitante de la cancha del Globo.
Siempre de atrás
Ya en su primer semestre sorprendió convirtiendo ocho goles, justo antes de la llegada de Edinson Cavani, que primero lo obligó a compartir el ataque con su compatriota o bien cederle su lugar si Jorge Almirón cambiaba el esquema.
Más cerca en el tiempo, Diego Martínez y Fernando Gago también intentaron variantes con La Bestia como recambio y no como primera opción. Siempre, siempre se terminó metiendo Merentiel. A fuerza de goles, pero mucho más de esfuerzo y de las ganas que los hinchas tanto le valoran.
Y como siempre estuvo, ante las malas condiciones físicas de Cavani y Milton Giménez (otro que lo relegó mucho últimamente), MM fue titular y su propio acompañante en el Mundial de Clubes.
Sin embargo, no alcanzó. Y, de vuelta en el plano local, el uruguayo corre y corre pero la historia es la misma. Por eso la bronca, por eso la sorpresa. Y una escena que ya es histórica.
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