El juicio que se lleva adelante contra Claudio Contardi, el exmarido de Julieta Prandi, acusado de abuso sexual y violencia psicológica, llega a su instancia final esta semana y el veredicto se conocerá este miércoles.
Durante la jornada del viernes se cerró la etapa de alegatos de las partes y la fiscalía. En ese sentido, la querella encabezada por el abogado Fernando Burlando exigió 50 años de cárcel para Contardi, mientras que el fiscal Chistian Fabio pidió 20 años de prisión.
En la semana hubo varios testimonios, entre ellos algunos más contundentes, además del relato de la víctima, Julieta Prandi. En diferentes días declararon testigos convocados por la defensa, entre ellos, el jefe de seguridad del barrio privado, donde vivieron el acusado y la denunciante, y una psicóloga, quien sustentó la posición de la modelo.
“‘En realidad no la violó tantas veces’”
Javier Baños, el abogado de Prandi, visitó los estudios de LN+, donde reconstruyó las palabras de la defensa de Claudio Contardi. “En el alegato final, dijo: ‘Estos hechos no pasaron, son mentira. Y si pasaron, en realidad no la violó tantas veces, la violó una sola vez y de forma prolongada’”, detalló.
Además, sobre el abogado de Contardi, aseguró que “solo se dedicó a poner palos en la rueda”. Sobre los 50 años de pena que exigen para el exmarido de Prandi, Baños dijo: “pedimos esa condena porque estamos seguro de que una persona así no se va a recuperar jamás”.
Rechazaron la prisión preventiva
El Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de Zárate-Campana desestimó el jueves el planteo formulado por el abogado Javier Baños, integrante del equipo legal de Julieta Prandi, para que Claudio Contardi quedara detenido durante el juicio en su contra por abuso sexual, violencia psicológica y amenazas.
Para Javier Baños, la justificación de su pedido de prisión preventiva “es porque hay riesgo de fuga del acusado”.
Detalles explícitos y desgarradores de la denuncia de Prandi
“Quiero justicia y una condena ejemplar. Me robaron años de vida: fue un calvario”. Con esa declaración la modelo y actriz Julieta Prandi abrió el jueves una ronda de prensa en el ingreso del Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de Zárate-Campana, donde se lleva a cabo la segunda audiencia contra su exmarido Claudio Contardi, acusado de abuso sexual y violencia de género.
“Yo era una cosa y lo único que quería era estar muerta”, aseguró Prandi en su conmovedor relato. Con la voz quebrada pero una postura firme, agregó: “No sé si voy a poder abarcar todo lo que pasé. Fue mucho y de todos los colores”.
“Tengo la suerte y el privilegio de estar acá y poder contarlo. La mayoría termina muerta”, enfatizó la conductora que, al mismo tiempo, manifestó que “con que lo condenen a mi exmarido a 20 o 30 años de prisión, me quedo contenta”.
Los pedidos de condena
El equipo defensor de Julieta Prandi, encabezado por el abogado Fernando Burlando, exigió ante el Tribunal una condena de 50 años, argumentando la “incurabilidad” del acusado. Por su parte, la Fiscalía encabezada por Christian Fabio, clamó una pena de 20 años, aduciendo que quedó probada la participación del exmarido de Pandi en «hechos aberrantes y sostenido por cada una del resto de las pruebas que trajimos a esta sala”.
El acto fallido de Contardi
Al finalizar la segunda audiencia del juicio, Julieta Prandi develó ante prensa el acto fallido que tuvo su exmarido al momento de declarar. “Él terminó de condenarse diciendo: ‘Nunca abusé de ella sin su consentimiento’. Después de eso no tengo más nada que decir“, enfatizó.
Consultada sobre la negativa de Contardi a la realización de las pericias, Prandi se limitó a responder: “Tiene mucho que ocultar. Su cabecita le jugó una mala pasada; prácticamente confesó mis abusos”.
“Tiene que pagar”
“Lo miré con desprecio y lástima, lo único que merece. Sus manipulaciones, siempre lo mismo. Alejó a todos de todos. No le dejó familia, amigos, padre, nada. Tiene que pagar”. Esa fue la respuesta de Eduardo Prandi, ante la pregunta sobre qué le producía ver al exmarido de su hija, Claudio Contardi.
“Yo sabía de entrada que él era así. Yo lo hice averiguar y ahí tuve una definición funesta de él. Yo trabajaba en una empresa de seguridad y el comisario que trabaja con nosotros me averiguó y al día siguiente me dijo: ‘si amás a tu hija, alejála de ésta persona’“, concluyó.