El miércoles 13, en horas de la noche, Los manifestantes quemaron gomas y arrojan piedras cerca de la unidad policial. Ocurrió luego de conocerse el deceso de Lucas Pereyra, de 17 años, que estaba internado desde el sábado 2 en el Hospital Samic, tras despistar y chocar en medio de una persecución policial, según denunció la familia.
El intendente Matías Vilchez dijo en declaraciones al programa Cadena de Noticias, que se emite por la señal C6Digital, que los sucesos ocurridos no fue una manera de honrar al joven que falleció en el Hospital Samic donde lo ingresaron en mal estado por las heridas que presentaba.
«Si hay algo que tenemos que aprender después de esta situación es a tratar de cumplir con las reglas de tránsito, a tratar de tener en condiciones (un vehículo), a tratar de usar las medidas de seguridad», observó.
Luego refirió que ese miércoles estaban gestionando junto con el padre de la víctima «para apurar a la morgue para que pueda traer el cuerpo lo antes posible».
Vilchez remarcó que se debe recordar el contexto «para que la gente lo entienda, no hay que cambiar el discurso». «Y también hay que hacerse cargo y hacerse responsable de esta situación. Yo no puedo hablar del hecho porque no estuve, no sé no estoy en condiciones de hablar del hecho pero sí puedo decir que lo que pasó en San Javier no fue un reclamo de justicia, fue netamente vandalismo, fue una una exageración y una brutalidad de la cual el 99% de esta población que son 24 000 habitantes no está acostumbrada y no adhiere», puntualizó el Jefe comunal.