Diego Guelar, con una vasta trayectoria como embajador en países clave como Brasil, Estados Unidos y China, ofreció una perspectiva crítica y aguda sobre la situación actual de Argentina.

En una entrevista con este medio, el diplomático abordó temas de gran relevancia, desde el estancamiento en las relaciones con Brasil hasta su desilusión con la política interna del Propuesta Republicana (PRO) especialmente con su principal referente, Mauricio Macri.

Subrayó la importancia estratégica de fortalecer los lazos diplomáticos con Brasil, el principal socio de Argentina en el Mercosur, para lo cual recomendó a Javier Milei y Luiz Inacio Lula Da Silva dejar diferencias ideológicas de lado y fortalecer el Mercorsur.

El diplomático argumentó que el país necesita generar credibilidad a través de la estabilidad política y el respeto a las instituciones.

Cuestionó con dureza a Mauricio Macri, por la crisis que atraviesa el PRO y observó una excesiva visión unipartidaria de La Libertad Avanza en un país con historia pluripartidaria.

¿Cómo está la Argentina en cuanto al alineamiento con Estados Unidos?

Bueno, la palabra alineamiento es como mínimo confusa. Podría ser sinónimo de subordinación. Y uno ve que en política exterior hay muchos países que tienen más o menos acercamiento con Estados Unidos, pero ninguno que se declare alineado. No tengo duda de que nosotros tenemos una relación muy importante con Estados Unidos. A mi juicio, el grado de relaciones, primero con nuestros vecinos y el proceso de integración hoy desgraciadamente casi congelado, a mi juicio debería ser prioritario. Es el primer círculo en las relaciones de un país donde somos accionistas, donde nuestra voz, nuestro voto tiene mucho peso. Lo que ocurre en el Atlántico Sur, en la proyección del Pacífico Sur a través de nuestro vecino y socio Chile, la proyección Antártica, sin lugar a duda es un lugar donde somos muy, muy importantes. En el segundo círculo, sin lugar a duda, está Estados Unidos y la Unión Europea, por nuestro vínculo histórico, cultural, económico, de inversiones extranjeras. El tercer círculo está encabezado por China, porque es el mayor socio de 140 países en el mundo sobre 192. Entonces, cuando estoy hablando de un tercer círculo, no lo estoy de ninguna forma desvalorizando, es muy importante. Pero creo que hay que hacer esa graduación en términos de cercanías, alejamientos, coincidencias y esta definición de alineamiento suprime todo eso. Esta palabra, el primero que usó en la historia argentina fue Carlos Saul Menem, y yo era su embajador en Estados Unidos y lo discutí con él, creo que fue un gran presidente, pero que eso no fue feliz, como no fue feliz…

¿Aquel concepto de relaciones carnales?

Claro, que mi gran amigo y respetadísimo canciller (Guido) Di Tella patentara lo de las relaciones carnales, pero yo creo que son errores menores en relación a lo que pasó. En la práctica, en esos años, no estuvimos alineados, tuvimos una gran relación con los vecinos, una gran relación con China, una gran relación con Europa, pero no me parece feliz la forma de definirlo. Soy judío y no me parece una buena forma de definir una gran relación de amistad y de asociación que tenemos con Israel desde el nacimiento del Estado de Israel como alineamiento, no me parece que describa la relación verdadera que tenemos.

¿Fue o no adecuado el hecho de que Argentina decidiera no ser parte de los Brics?

Claro, pero fíjese una cosa interesante, los Brics nacen realmente de un papel de un banquero de Wall Street que yo conocí siendo embajador en Estados Unidos, Jim O’Neill (inversor), un hombre muy inteligente. Él sugería que los grandes cuatro países emergentes fueran los grandes interlocutores. Después del fin de la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética, era bueno que cuatro países que sumaban 30% del Producto Bruto hicieran esta asociación pensando en el diálogo entre ese segundo mundo y el primer mundo, que era el grupo de los siete, Europa, Estados Unidos y Japón. En ese sentido si diez años atrás usted me hubiera preguntado a mí… o menos, 5 años atrás, yo hubiera dicho ‘ojalá ingresemos a los Brics’. Pero cambió el mapa. Empezó a haber fracturas y confrontaciones entre Estados Unidos y China. Ocurre la invasión de Rusia a Ucrania, un dato brutal, realmente violatorio de todas las normas de derecho internacional. Entonces, yo creo que no era el momento para ingresar, era un tema para tenerlo ahí congelado. Se dio además, que nosotros fuimos incorporados a los Brics al mismo tiempo que Irán, que es el único país enemigo de la Argentina sobre 192 países, nos metió dos bombazos, la verdad, nos declaró la guerra Irán. ¿Usted se imagina que fuéramos en la cumbre el año pasado en Moscú, justamente a darle un abrazo a Putin, de la mano del ayatolá? No lo podíamos hacer, por encima de cualquier consideración, no podíamos hacerlo. Creo que tenemos muy buena relación con India, incluso tenemos relación comercial con Rusia importante, obviamente con China, con Brasil.

¿Habría que volver entonces a tratar de reforzar relaciones diplomáticas con Brasil, que es nuestro principal socio comercial?

Es central. Yo tuve el honor de ser embajador en Brasil, creo que el proceso de integración regional, y en especial la relación con Brasil y Argentina; somos el Francia y el Alemania, de la Unión Europea. Fuimos el hijo dilecto de la Unión Europea, el Mercosur, y no lo consolidamos. Mercosur más Chile somos 300 millones de habitantes, 20 millones de kilómetros cuadrados y la sexta potencia económica del mundo, estaríamos en la mesa chica del poder mundial, ¿No le parece que eso es más importante que cualquier reyerta, que si un presidente le gusta al otro, que si uno es de izquierda y el otro es de derecha? Creo que eso es una anécdota en relación al desafío de la integración regional, a constituir la unión de naciones sudamericanas, es responsabilidad central de Brasil y Argentina.

Duro contra Macri y ahora es candidato a senador

En el ámbito político nacional, Guelar expresó su desilusión con la dirección que tomó el PRO bajo la conducción de Mauricio y Jorge Macri. A su juicio, el PRO perdió el rumbo al no entender que su rol debería ser el de un pilar central en la construcción de una coalición más amplia y diversa, que incluya a otras fuerzas como La Libertad Avanza y el peronismo no kirchnerista.

Sobre LLA, dijo: “Pretende pintar todo de violeta y una versión a mi juicio excesivamente autoritaria, unipartidaria, en un país que tiene una historia pluripartidaria, que se expresa como en todo Occidente, a través de coaliciones. Eso no es debilidad del poder, es entender la realidad”.

Guelar ofreció su candidatura a senador por la Ucedé por Caba al titular del Same, Alberto Crescenti. Lo planteó como un acto de compromiso con lo que considera la necesidad más urgente del país: la unidad nacional. Al no tener la aceptación de tal ofrecimiento, quedó firme su candidatura.

En diálogo con Radio Con Vos, el actual candidato a senador por la ciudad de Buenos Aires, acusó e los últimos días a Macri de falta de liderazgo político, lo responsabilizó por la crisis interna que atraviesa el PRO tras el acuerdo con La Libertad Avanza y lo insultó sin tapujos. “Sin lugar a duda, es el responsable. Para ser claro, lo voy a decir: un reverendo hijo de puta. No sé si es elíptico, no es muy diplomático”. El dirigente se mostró desconcertado por la liviandad con la que el líder de los amarillos cedió el nombre y los colores de los suyos, en favor del espacio de Javier Milei.

“Habrá que consultar con su psiquiatra, o con su gurú o quien sea, ¿qué diablos le pasó?”, planteó.

Guelar añadió que su comportamiento está “influenciado por la era Milei”, en alusión a los insultos que hizo a toda voz.