NUEVA YORK.- La movilización estadounidense en el Caribe podría recibir una suerte de licencia para matar, si avanza una iniciativa que estaría circulando en la Casa Blanca, un borrador de proyecto de ley que le daría poderes a Donald Trump para accionar a discreción contra quienes el presidente considere “narcoterroristas”.
Según indicó The New York Times, no estaba claro quién escribió el borrador o si podría ser aprobado por el Congreso liderado por los republicanos, pero la Casa Blanca lo ha estado distribuyendo por todo el Poder Ejecutivo.
La propuesta no solo autorizaría legalmente al presidente a atacar a quienes considere narcoterroristas, sino también a los países que según él los ayudaron. De acuerdo con el informe, el borrador despertó inquietudes y dio lugar a delicadas deliberaciones internas tanto en la Casa Blanca como en el Congreso en Washington.
Según un funcionario del gobierno, el borrador se originó en un miembro del Congreso que pidió asistencia técnica para mejorarlo. El funcionario dijo que la circulación en el Ejecutivo y en agencias del gobierno es una cortesía de rutina que no debería interpretarse como un respaldo.
Tres fuentes cercanas al asunto confiaron al Times que el legislador republicano Cory Mills, integrante del Comité de las Fuerzas Armadas de la Cámara de Representantes, participó en la elaboración del borrador. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, se negó a hacer comentarios, alegando que está prohibido discutir “borradores que puedan o no estar circulando”.
Estados Unidos desplegó ocho buques en el mar Caribe para combatir el narcotráfico y desde inicios de septiembre ha eliminado tres embarcaciones que presuntamente traficaban droga, con un saldo de 14 muertos, según Trump. La nueva legislación quitaría los reparos legales que despertaron esos operativos armados permitiendo una ofensiva libre de restricciones contra personas e incluso países.
Desde Caracas, el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, dijo este viernes que hay “una guerra no declarada” tras el despliegue de buques de Estados Unidos en el mar Caribe, que consideró como una “amenaza militar”.
“Es una guerra no declarada, y ya ustedes ven como personas, siendo o no siendo narcotraficantes, han sido ajusticiadas en el mar Caribe”, sostuvo durante un balance sobre ejercicios militares.
“Ajusticiados, sin derecho a la defensa”, insistió el ministro venezolano, al cuestionar que las lanchas, que según Trump procedían de Venezuela, no hubieran sido interceptadas antes. “Con tanta tecnología y tanto poder y no estar en capacidad de interceptar una embarcación en los espacios acuáticos del mar Caribe», señaló.
Venezuela anunció el miércoles ejercicios militares por 72 horas en la isla La Orchila, a 65 kilómetros de la tierra firme venezolana, y cerca de donde Estados Unidos interceptó una embarcación pesquera durante ocho horas el pasado fin de semana.
Los ejercicios responden al despliegue de Estados Unidos, que acusa al presidente Nicolás Maduro de encabezar carteles de droga y ofrece 50 millones de dólares por su captura. La televisión estatal difundió imágenes sobre las maniobras y, según detalló Padrino, se “lanzaron misiles de la clase C-802 y C-M90” y cohetes.
“Hay un plan imperial de cambio de régimen en Venezuela, de imponer un gobierno títere de Estados Unidos y venir a robarnos nuestro petróleo, que es la mayor reserva internacional del mundo, nuestro gas, que es la cuarta reserva más grande del mundo, y nuestro oro», declaró por su parte Maduro, quien ordenó a los militares ir a los barrios a dar entrenamiento a los civiles.
Este sábado, “los cuarteles, las Fuerzas Armadas Bolivarianas, irán al pueblo, a las comunidades, para desplegarlas, inspeccionarlas, para enseñar a todos los alistados, a los residentes, cómo manejar el sistema de armas», dijo durante una sesión de las Brigadas Militares Comunitarias para la Educación y la Salud.
Al mismo tiempo, la canciller de Colombia, Rosa Villavicencio, criticó la “desmesurada” presencia militar de Estados Unidos en aguas del Caribe, y aseguró que “nada tiene que ver con la lucha contra el narcotráfico”.
En una entrevista con la AFP, la ministra aseguró que toda América Latina está “preocupada” por “la posibilidad de una intervención” militar en Venezuela.
Agencias AFP, ANSA y diario The New York Times