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En el bloque Ambiente, Sociedad y Sustentabilidad, conducido por Sonia Weisheim, el magíster en Investigación en Artes Plásticas y Visuales, Ernesto Engel, compartió detalles sobre su recorrido artístico y docente. Explicó cómo entiende al arte como una herramienta de aprendizaje y de libertad, tanto a nivel individual como colectivo, y repasó su experiencia formando a más de 140 artistas en Misiones. También se refirió a su relación con la naturaleza y a la función que cumple el arte en la vida cotidiana.
“Cuando uno estudia arte y danza, sabe que es necesario aprender para expresar. El arte es innato, pero también es aprendido”, señaló Engel, al ser consultado sobre el debate entre talento natural y formación. En ese sentido, consideró que todos tienen la capacidad de desarrollar su veta artística si cuentan con las herramientas y la práctica adecuada.
El artista contó que su inspiración surge de la observación de la naturaleza y, en particular, del agua y de los Güembé, elementos recurrentes en sus series.
Trabajo mucho a partir de fotografías, la naturaleza me da una guía. De ahí nace el proceso creativo”.
Además, remarcó el carácter terapéutico de la práctica artística. “El arte ayuda a vivir el presente. Cuando uno pinta, dibuja o crea, está plenamente en ese momento”, sostuvo. Engel vinculó esta idea con la importancia de sostener espacios de enseñanza y producción que acerquen el arte a la comunidad.
Respecto a su tarea como formador, recordó que en su taller pasaron más de 140 estudiantes que se iniciaron y consolidaron en la pintura.
Uno aprende enseñando, porque el otro también trae su mirada. Es un intercambio constante”
Para cerrar, dejó un mensaje vinculado a la vida personal y profesional. “La clave es hacer lo que uno quiere. Ahí está la felicidad”, afirmó Engel, quien a sus 74 años continúa dedicándose de lleno al arte y a la docencia en la provincia.
