La pantalla de tevé digitaliza la euforia. “É o Messi? Não, e o Flaco López mesmo!”, se lee en el graph. Dos conductores sonríen, cruzan chanzas, y no hace falta desmutear el LED 50 pulgadas para entender por qué. Palmeiras es tendencia en la pantalla, se impone como clima festivo entre novedades judiciales y el tráfico en rojo para Google Maps. El golpe se celebra. Se terminó el maleficio de los siete empates. Se acabó -y acabó- con River.
“La dupla Flaco-Roque brinda un show y coloca a Palmeiras en semifinales”, se lee en Globoesporte. El medio Lance! elige ser más descriptivo y resaltar algo no menor: que el equipo de Abel Ferreira “da vuelta” el partido revancha y avanza.
Si existían dudas por la mandíbula cristalina en los partidos fuertes (Corinthians en el Paulista y en Copa Brasil) que sembraron dudas sobre un entrenador que fue abucheado tras esas derrotas -y que reveló que eso aún le “sangra por dentro”. Todo quedó archivado detrás de las fotos de Vitor Roque en modo Tigrinho y los memes de López comparado con Messi. Una secuela de la chanza de Rafael Veiga al argentino tras su convocatoria a la Selección.
Ferreira fue el más sensato entre tanta euforia al recalcar que hace semanas estaba en la mira. Y que además River expuso errores de un Verdao “colosal”, para la prensa local. “La primera vez que nuestro rival llegó a nuestra portería, marcó a balón parado y eso nos inquietó un poco. No porque no tuviéramos un estilo de ataque bien definido, sino porque no fuimos lo suficientemente audaces”, destacó sobre el equipo de su admirado Marcelo Gallardo.
River Plate –
Lo mejor de Palmeiras 3 – River 1
Video: FOX Sports.
Tanto que un Ferreira al que ahora le preguntan por su renovación (un radical cambio de escenario para un luso hasta hace semanas cuestionado) admitió que debió hablar en el entretiempo para hacer “dos ajustes tácticos” para “ser más agresivos con o sin balón”. Y ahí radicó la diferencia para torcer la historia. “Fuimos muy diferentes, más agresivos con y sin balón. En un partido equilibrado, no puedo decir que no lo fuera, pero nuestro rival tenía calidad”.
“River es un gran equipo, tienen tradición, fueron un rival muy duro, pero lo importante fue la clasificación, y nos la ganamos con méritos propios”, resaltó Weverton, decisivo con una atajada a Miguel Ángel Borja y un achique perfecto a Kevin Castaño sobre el final del primer tiempo. Imágenes que se repiten en las teles de los bares y hoteles. Que celebra Palmeiras. Que sufre y sufrirá River.
El regreso de River a Buenos Aires
Reserva River Plate –
Bronca, silencio y reflexión: River se vuelve de San Pablo para Buenos Aires
Nicolás Berardo
SAN PABLO (ENVIADO ESPECIAL).